Mi hija empezó a ir a la guardería a los 7 meses. Entre mis vacaciones, el permiso y todo, pasaron los meses, y aún le pasé 4 semanas a Víctor para que la pudiera disfrutar (en aquella época ya se podía hacer).
Miramos 3 guarderías cerca de casa, pero en esta nos pegaron un rollo de que no era un parking de niños y que hacían el método: Holístico?.
Yo, el primer día que la llevé por la mañana, me puse a llorar, y al día siguiente también. Después de estar tantos meses con ella, pensaba que la abandonaba. Me dijeron: no llores delante de ella, porque si te ve es muy malo.
De vez en cuando, me pedían la máquina de fotos porque había algún Evento.
La verdad es que en las fotos se ve ambientazo. O sea que mis terrores, eran infundados.
En las fiestas de cumpleaños, para celebrarlo les ponían un montón de espaguetis para que los cogieran con las manos a la hora del brunch.
Ya veo, que en la zona de cunas había mucho desmadre y que mi hija no estaba añorada para nada.
Había mucho rollo entre los colegas.
También celebraban carnaval. A mí me pidieron una bolsa de basura verde y los vistieron de Pera.
Un Party non stop.
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