Cuando vivíamos mi hermana y yo en un piso, también cerca de la #SagradaFamilia, tuvimos un gato.
Era negro total y se llamaba Fum.
Yo le hacía muchas fotos en blanco y negro; supongo que eran parte de la "obra artística".
En aquella época yo estudiaba Bellas Artes, en concreto: Pintura y, como motivo de inspiración para mis cuadros, pintaba al gato. Tengo una foto de la mesa de taller que tenía en Bellas Artes y allí aparecen dos obras con el gato.
Mi hija Cloe también adora a los gatos.
Aquí en Barna tiene unas amigas que tienen dos gatos, con manchas blancas y negras.
Ella les hace muchas fotos, ahora con el móvil.
Cloe también estaba todo el día dibujando a los gatos.
Ella siempre va con una bolsa llena de cuadernos y lápices y pinturas para hacer dibujos.
Pero es que en Bruselas, donde está ahora, en la casa que vive con una familia, también tienen un gato.
Se ve que el gato está todo el día en el cuarto de mi hija y ella está encantada.
También aprovecha para hacerle dibujos.
Ahora los manda por WhatsApp.
Todo esto es pura genética.

















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